Parece mentira que a estas alturas no sepamos, cuando viajamos, en qué sitios es mejor no hacerse selfies. Ya ha pasado varias veces: el influencer o famoso de turno sube una foto durante un viaje y le llueven las críticas. Que si posar allí es una falta de respeto, que si está utilizando a niños sin recursos para promocionarse, que si presume de viaje de lujo en una zona pobre… Así que hemos recopilado un listado de las situaciones en las que peor visto está posar para tus seguidores.
1. En lugares históricos donde han ocurrido desgracias
Si visitas sitios como Auschwitz o cualquier otro campo de concentración, pórtate bien y no saques la camarita. Si estás en Honolulu y en tu ruta turística no puede faltar el memorial de Pearl Harbor, deja el signo de la victoria y los morritos para otro momento. Si tu agenda vacacional incluye la ciudad fantasma de Prípiat, no te dediques a buscar la imagen más original. En resumen, que mejor no poses para Instagram donde ha muerto gente y donde ha habido sufrimiento.
2. En aldeas de gente sin recursos
¿Es que no aprendimos nada después del aquel viaje de Dulceida y su mujer a África? Visitar una aldea sin apenas agua ni comida, regalarles gafas de sol a los niños y subirlos a tus Stories presumiendo de buena obra es una de las peores ideas que se te puede pasar por la cabeza si viajas. Aunque lo hagas con tu mejor intención y, como dirían Pantomima Full, en tu cabeza sonase espectacular: NO.
3. En medio de conflictos políticos
La influencer rusa @fitness_mama tuvo, el pasado octubre, una de las ideas más peregrinas que se han visto en redes: subir fotos posando sexy frente a vallas ardiendo en Barcelona, en el fin de semana de revueltas que tuvo lugar tras la sentencia del procés. Si durante tu viaje te topas con algo similar, no uses las protestas de la gente para ganar un puñado de likes. Sé respetuoso. No seas @fitness_mama.
4. Usando otras culturas como “trofeos”
Existen empresas como I Like Local que se dedican a conectar a viajeros con otras culturas diferentes a la suya, alojándolos incluso con ellos para que puedan vivir la experiencia en primera persona… pero de ahí a posar con tu mejor sonrisa rodeado de miembros de aldeas indígenas con los que no has cruzado una palabra o de niños de las favelas, hay un trecho. Visita ciudades diferentes a la tuya, empápate del choque cultural… pero no lo uses de forma frívola para nutrir de contenido tus redes.
5. Molestando a animales solo para que posen contigo
Una de las ventajas que tiene visitar el hábitat de animales salvajes es precisamente esa, poder verlos desenvolviéndose de forma natural en lugar de acotados en las jaulas de los zoos. Por eso, intentar fotografiarte con ellos puede tener dos consecuencias. La primera, que hagas el ridículo persiguiendo a un mono o a un ciervo solo para sacarte un selfie con él y, la segunda, que el animal en cuestión no esté por la labor y te lleves un zarpazo de recuerdo.
En resumen: una de las condiciones del buen viajero es ser respetuoso con su destino, valorarlo y saber que conocer de primera mano un lugar diferente al nuestro no es, para nada, una actividad insustancial de la que sacar tajada para ganar seguidores.